El verano pasado me dediqué a montar, decorar y amueblar la casa Mediterránea de Altaya pero no ha sido hasta hace un par de semanas que he colocado los detalles que convierten una casa en un hogar.
Seguro que más de una compañera del foro Tus Miniaturas reconoce creaciones suyas.
Os doy pistas: el jersey, el muñeco de encima de la cama, el cesto de costura, las madejas de lana, las cositas de encima del tocador..., ésto sólo aquí, en las demás estancias hay más regalos de mis compañeras que son auténticas artistas.
Todavía falta poner las cortinas, añadir más utensilios propios de un cuarto de baño y, sobre todo, encontrar un par de espejos que no sean demasiado grandes y que queden bien encima del mueble lavamanos.
Fijaos en la alfombrita, es de otra compañera del foro era un juego de dos toallas que yo he reconvertido en alfombra y... a ver si encontrais la otra.
En la decoración original, en esta estancia iba la habitación del bebé, como no me apetecía mucho tener niños en la casa, la he cambiado por una salita contigua a la habitación (como las que tenían las casas de antaño) donde poder leer y tomar un té al calor de la chimenea, resumiendo, un pequeño "refugio" particular.
En el arco que separa baño y habitación me gustaría colocar una puerta ya que me parece inacabado dejarlo así, solo espero que la medida sea estándard porque sino ya me veo haciéndola yo y os aseguro que, ahora mismo, no tengo ni idea de por dónde empezar.
En la pared del cabecero de la cama falta, quizás, un cuadro tipo puzzle (de los que van en varias piezas) o uno rectangular, ya veré que encuentro. En cuanto a la colcha... sólo la mantengo porque es el juego de la banqueta pero la idea es colocar un quilt encima para disimularla un poco.
De momento, así ha quedado el piso superior, en otra entrada os mostraré el inferior, paciencia.
En el caso de la mesa rectangular, después de un buen lijado le di un par de manos con laca blanca, no olvideis los correspondientes lijados entre capa y capa. La mesa redonda está lijada y pintada con dos capas de pintura acrílica (y por supuesto sus lijados). El siguiente paso es mezclar un diluyente acrílico y un espesante (en la etiqueta del producto pone: "facilita el flotado de colores") en la proporción de 4 a 1 (4 partes de diluyente por 1 parte de espesante) con el color que elijamos para contrastar. Para la mesa pintada en blanco lo mezclé con marrón y el de la mesa verde lo mezclé con negro. Con un pincel de cerdas gruesas se hacen pasadas de lado a lado y siempre en la misma dirección para conseguir este efecto "veta". Para terminar, una vez seco se le da una mano de barniz con un pincel de pelo suave, sin insistir demasiado en las pinceladas y evitar emborrachar las rayas hechas con el pincel grueso. Fácil ¿no? 
